Las primeras medidas del nuevo Estatuto de los Trabajadores Autónomos ya están en vigor desde el pasado 12 de octubre y el resto entrarán en vigor el próximo 1 de enero de 2008.
Desde COVACO, que ha participado activamente en su elaboración
a través de su acuerdo con ATA, se considera que este Estatuto es un punto de partida para conseguir la igualdad de derechos de los trabajadores y empresarios autónomos con los trabajadores que cotizan por la Seguridad Social.
Para trasladar toda la información sobre los aspectos que afectan al comerciante de este nuevo Estatuto de Autónomo hemos editado un nuevo número de la Guía Útil del Comercio, que en breve recibirán las Federaciones de Valencia, Castellón y Alicante para entregar a todos los comercios asociados.
En la pasada reunión del Observatorio de Comercio de la Comunidad Valenciana, la Federación Alicantina de Comercio-Facpyme planteó la necesidad de promover un cambio en la regulación de los periodos de rebajas, iniciativa apoyada por el resto de las federaciones miembro de COVACO.
Esta necesidad de cambio, cada vez más imperiosa, se debe a razones objetivas que están afectando al sector comercial y que es conveniente conocer y analizar: pérdida del sentido real del periodo de rebajas, excesiva duración y factores externos como los cambios climáticos o las especiales características de los municipios de nuestra
Comunidad.
La actual práctica de las rebajas ha desvirtuado la idea inicial por la que se crearon: vender los stocks al final de temporada a un precio inferior. La proliferación de campañas de descuentos y ofertas, que cuentan con una regulación específica que se incumple constantemente,
hace que existan durante todo el año rebajas encubiertas por parte de
los grandes grupos de distribución.
La excesiva duración de las rebajas perjudica seriamente al comercio urbano porque durante cuatro meses, un tercio de la campaña, está colgado el cartel de rebajas, con lo que se pierde margen y no siempre se vende más. Un periodo que sólo interesa a quienes disponen de grandes recursos y pueden sacrificar parte de los márgenes ante un posible
aumento de las ventas.
Los cambios en la climatología, en especial con inviernos cálidos o en los
que el frío aparece mediada la campaña de otoño-invierno, hacen que se retrasen las compras de las prendas de abrigo, las que necesitan un mayor desembolso.
Este hecho provoca que en los meses de octubre y noviembre las ventas se ralenticen, ya que el consumidor un mes antes de las rebajas aplaza sus
compras a la espera de un menor precio.
En la campaña estival, por el carácter turístico de nuestra Comunidad, las
rebajas comienzan justo cuando existe un mayor número de clientes potenciales por la llegada de turistas.
Frente a estos problemas se han propuesto ante el Observatorio de
Comercio de la C.Valenciana una serie de medidas destinadas a paliarlos:
– Un mayor control de las ofertas y promociones fuera de temporada y el aumento de las inspecciones.
– Reducir los periodos de rebajas, ya que las ventas son altas sólo los quince primeros días, y se solapan las temporadas siguientes, lo que produce confusión en el consumidor.
– Retrasar las rebajas de invierno para que el comercio en general y en especial el de textil, calzado y complementos que representa
el 60% del sector, puedan disponer de una campaña amplia para poder vender sus mercancías sin depender de factores externos como la climatología.
– Retrasar el periodo de rebajas en la campaña estival para poder aprovechar el incremento de clientela.
A modo de conclusión, la solución a la situación actual pasa por que las rebajas fueran más tarde, más cortas y, durante el resto de la campaña, con un mayor control de las rebajas encubiertas
de las grandes cadenas; las grandes beneficiadas del actual calendario ya
que trabajan con grandes márgenes.
Revista Comercio Urbano